El Tribunal Golovinski de Moscú condenó a dos años y seis meses de cárcel a Oleg Orlov, que fue esposado en la misma sala y trasladado a prisión por agentes encapuchados.
El activista, de 70 años, fue condenado por el artículo «Querían fascismo, ya lo tienen» publicado en 2022 en la prensa francesa, donde, según sus palabras y a la vista de lo ocurrido en los últimos meses, incluida la reciente muerte en prisión del opositor Alexei Navalny, no exageró «ni un ápice».
La Fiscalía acusó a Orlov, que también se manifestó en la plaza Roja contra la guerra en Ucrania, de albergar odio contra el Ejército ruso y animadversión contra los principios morales tradicionales y los valores patrióticos que profesa el Kremlin.
Decenas de personas – incluidos diplomáticos occidentales- acudieron al tribunal para apoyar a Orlov, uno de los últimos críticos del Kremlin en libertad y en Rusia, ya que muchos han partido al exilio.
Orlov: «No me arrepiento de nada»
En su última intervención ante el tribunal, el lunes (26.02.2024), Orlov denunció «el estrangulamiento de la libertad» en Rusia y el envío de tropas rusas a Ucrania. «No me arrepiento de nada», aseguró.
Además, calificó de «asesinato» la muerte del opositor Alexei Navalny en una cárcel del Ártico, el 16 de febrero, y llamó a otros opositores a «no perder el coraje».
El fallo coincidió con el noveno aniversario del asesinato, cerca del Kremlin, del dirigente opositor y ex vice primer ministro ruso Boris Nemtsov.
Orlov fue declarado culpable en primera instancia en octubre de 2023 y fue condenado a una pequeña multa, una pena ligera comparada con las sentencias habituales contra otros críticos del Gobierno. Pero la justicia rusa entonces apelar a la sentencia y abrió un nuevo proceso contra él.
Con información de DW