Un tribunal estadounidense podría aplazar hasta el 19 de septiembre una audiencia para presentar la oferta más alta en una subasta de acciones de la matriz de la refinería de propiedad venezolana Citgo Petroleum, según una moción presentada el viernes.
El funcionario del tribunal de Delaware que evalúa las ofertas en una subasta histórica de acciones en la matriz de la séptima refinería de petróleo más grande de Estados Unidos solicitó la demora de dos meses para completar su evaluación y terminar de negociar con los postores, dice la moción. La moción tiene que ser aceptada por el juez para entrar en vigor.
El caso ha abierto nuevos caminos legales en la ejecución de laudos arbitrales internacionales y en el resquebrajamiento de la inmunidad soberana y corporativa. Se espera que la subasta conduzca a un cambio de propiedad de la joya de la corona extranjera de Venezuela para satisfacer 21.300 millones de dólares en reclamaciones contra el país sudamericano.
El tribunal tenía previsto finalizar el proceso de venta, que ha incluido dos rondas de pujas, el 15 de julio, días antes de las elecciones presidenciales de Venezuela del 28 de julio, que Washington ve como una posible salida a la larga crisis política del país sudamericano.
Ofertas competitivas
Entre las varias ofertas competitivas, “varias ofertas eran procesables”, escribió en la moción Robert Pincus, el funcionario judicial que supervisa la subasta. Se requiere tiempo adicional para aclarar los términos de algunas ofertas y negociar un acuerdo de venta definitivo, añadió.
Ninguna de las ofertas presentadas este mes cumplía el total de las demandas presentadas ante el tribunal, según dijeron a Reuters esta semana dos personas cercanas al asunto, lo que predijo el retraso. La moción que solicitaba el aplazamiento no revelaba el número de ofertas de la segunda ronda ni sus importes.
Citgo es la séptima refinería de petróleo de Estados Unidos, con terminales de almacenamiento, participaciones en oleoductos y tres refinerías que pueden procesar hasta 807.000 barriles diarios de crudo en combustibles. En 2019, rompió lazos con su matriz última, la petrolera estatal Pdvsa, con sede en Caracas.
La administración del presidente Nicolás Maduro y su oposición política han estado solicitando al gobierno estadounidense que retrase o detenga la subasta, para que sus resultados no alteren el resultado electoral.
En una primera ronda de licitación en enero, las ofertas presentadas por los inversores alcanzaron los 7.300 millones de dólares, frente a una valoración de mercado de entre 11.000 y 13.000 millones de dólares para la refinería con sede en Houston.
Los abogados que representan a Venezuela las calificaron de “decepcionantes” y recientemente han presionado al tribunal para que organice una tercera ronda si las ofertas de la segunda ronda que finalizó este mes no se acercan a un valor justo para la empresa.
Al menos cinco grupos de inversores presentaron ofertas vinculantes en la segunda ronda, y tres consiguieron compromisos de financiación de bancos y asesores como JPMorgan, Morgan Stanley y Rothschild & Co, según dijeron a Reuters este mes personas cercanas al asunto.
Se espera que una audiencia programada para el 2 de julio ponga al día al tribunal sobre el progreso de su evaluación. El juez podría actuar sobre la solicitud en ese momento.
Con información de Versión Final