Un solitario mono capuchino, que inicialmente se mostraba inofensivo y amigable, pasó de ser una presencia curiosa a convertirse en una amenaza para los residentes, especialmente los niños.
El primate, que deambulaba por los alrededores y disfrutaba de la hospitalidad de los vecinos, atacó a varios niños, causando alarma y preocupación en la comunidad.
El Comportamiento inicial del Mono Capuchino
Según relatos de los vecinos, el mono capuchino era un visitante regular en el barrio, pasando su tiempo en los árboles y deleitándose con mangos, cambures y otras comidas ofrecidas por los habitantes locales.
Durante un período, no mostró signos de agresión y fue percibido como una presencia interesante pero inofensiva.
Sin embargo, el ambiente cambió drásticamente cuando el primate atacó a tres niños, dejando una de las víctimas, un niño de 8 años de edad, con una herida en la rodilla que requirió cinco puntos de sutura.
La intervención y captura del Mono en Barquisimeto
Ante la creciente amenaza planteada por el mono agresivo, las autoridades pertinentes actuaron con prontitud.
Un equipo del Parque Zoológico y Botánico Bararida, en colaboración con el Ministerio de Ecosocialismo, implementó un plan de captura con el apoyo activo de los vecinos preocupados por la seguridad de la comunidad.
Tras varias semanas de preocupación, el primate fue finalmente capturado, brindando alivio a los residentes que habían estado enfrentando esta inquietante situación.
La pronta acción de las autoridades y la cooperación de la comunidad fueron fundamentales para abordar este desafiante problema y restaurar la sensación de seguridad en el vecindario.
Con información de La Verdad