Un fármaco anticonceptivo experimental probado en ratones reduce de forma rápida y temporal la fertilidad masculina, al detener por unas horas la capacidad de movimiento de los espermatozoides, según se detalla en un nuevo estudio publicado el martes por la revista Nature.
El hallazgo supone un avance en los esfuerzos por desarrollar una píldora anticonceptiva masculina, que podrían tomar los hombres poco antes de la actividad sexual y recuperar la fertilidad al día siguiente.
El estudio del Weill Cornell Medicine (EE. UU.) descubrió que los inhibidores solubles de una enzima llamada adenilil ciclasa (sAC) pueden reducir la motilidad de los espermatozoides en ratones y en humanos.
Un compuesto que desactiva la enzima:
La enzima es esencial para activar la capacidad de los espermatozoides para nadar y madurar, de modo que puedan viajar por el tracto reproductor femenino y fecundar un óvulo.
El equipo desarrolló un compuesto, llamado TDI-11816, que inactiva la sAC. Tras inyectarlo en ratones, los científicos observaron que los espermatozoides no podían impulsarse hacia adelante, e impedía su maduración.
La fertilidad regresa tras unas horas:
El compuesto no interfería en el comportamiento sexual de los animales, pero la fertilidad se eliminaba en las horas siguientes a la administración del fármaco.
Una única dosis de ese compuesto inmoviliza los espermatozoides de ratones hasta dos horas y media. A las tres horas, algunos espermatozoides empiezan a recuperar la motilidad y a las 24 horas, casi todos han recuperado el movimiento normal.
La eficacia anticonceptiva era del 100 % en las dos primeras horas y del 91 % en las tres primeras horas.
El potencial del fármaco:
Los investigadores afirman que su trabajo aporta una prueba de concepto de que los inhibidores solubles de la adenilil ciclasa tienen el potencial de proporcionar un anticonceptivo oral seguro, a demanda, no hormonal y reversible para los hombres.
El equipo tiene que seguir investigando para determinar si estos fármacos funcionarán eficazmente en humanos e identificar posibles efectos secundarios, y ya está trabajando en la fabricación de inhibidores de sAC más adecuados para su uso en humanos.
La investigación sobre anticonceptivos orales masculinos se ha estancado, en parte porque los posibles anticonceptivos para hombres deben superar un listón mucho más alto en cuanto a seguridad y efectos secundarios.
DW