Al menos 11 personas fallecieron en Río de Janeiro y una permanece desaparecida luego de fuertes lluvias que castigaron la ciudad la madrugada de este domingo, confirmó el cuerpo de Bomberos local.
Las precipitaciones alcanzaron con especial fuerza la zona norte de Río y municipios aledaños de la región metropolitana, donde se concentraron los decesos, fruto de un deslizamiento, ahogamientos y electrocuciones.
Una mujer, además, permanecía desaparecida luego de que su automóvil cayera en el curso de un río. Los bomberos realizaban este domingo búsquedas en el agua.
Los estragos causados por las lluvias llevaron al alcalde de Río, Eduardo Paes, a decretar este domingo “situación de emergencia”.
En tramos de la Avenida Brasil, una de las principales arterias de la ciudad, el agua acumulada llegó a superar el capó de automóviles y obligó a clausurar temporalmente la vía durante la noche.
Una decena de líneas de ómnibus no funcionaban y al menos cuatro estaciones de subterráneo debieron cerrar temporalmente este domingo debido a la acumulación de agua en los rieles.
Algunas regiones de la ciudad registraron un acumulado de más de 200 milímetros de lluvias en las últimas 24 horas, superando en un día la previsión para todo enero.
En Acari, uno de los barrios más afectados, la situación fue especialmente crítica para el hospital municipal Ronaldo Gazolla, cuyos consultorios en el subsuelo quedaron completamente inundados.
El temporal también afectó comercios, entre ellos donde trabaja Alexandre Gomes, quien sacaba agua del interior de la tienda este domingo.
“Llegué para trabajar y estaba todo inundado. Todos los años pasa lo mismo cuando llueve fuerte aquí, se convierte en una piscina, una laguna”, reclamó Gomes.
“Siguiendo orientación del presidente Lula, estamos actuando con el alcalde Eduardo Paes para garantizar todo el apoyo del gobierno federal a la población alcanzada por las fuertes lluvias”, dijo Waldez Góes, ministro de Desarrollo Regional en X.
Con información de AFP