La explosión e incendio registrados el 11 de noviembre en la planta Muscar de Petróleos de Venezuela (Pdvsa), en Monagas, obliga a la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) a aplicar prolongados racionamientos eléctricos en varios estados de Venezuela por la escasez de gas para producir energía térmica.
Fuentes de El Pitazo informaron que la producción de gas natural en Muscar, la principal planta de producción del país, cayó en casi un 80 % tras la explosión y que ello impide la alimentación de las centrales termoeléctricas de los estados Anzoátegui, Sucre y Nueva Esparta.
El ingeniero José Aguilar, especialista en sistemas de generación eléctrica, explicó que al no haber suficiente combustible para las termoeléctricas, el país depende aún más de la energía que se produce en la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar, conocida como Guri, que resulta insuficiente por las limitaciones que tiene la red de transmisión.
“Si hay una escasez de gas, se altera todo el sistema. Ellos pueden estar haciendo la maniobra de distribuir el gas que tienen para zonas privilegiadas, como el Distrito Capital, para que el impacto ahí no sea mayor”, estimó Aguilar.
Aseguró el experto que en Guri, donde se genera cerca del 80 % de la electricidad que demanda el país, hay suficiente producción de energía, pero la Red Troncal de Transmisión tiene limitaciones.
“Si no tienen gas suficiente, ellos pueden tratar de suplir ese déficit con más hidroelectricidad. Sin embargo, dado el mal estado en que se encuentra la red y a pesar de tener suficiente hidroelectricidad, no se puede equilibrar el sistema y se presta para una situación más inestable”, explicó.
El ingeniero agregó: “Al haber escasez de gas para generar electricidad en oriente, estos estados van a chupar más energía de Guri porque son los que están más cercanos a esa central, y quedan afectados los que están en la cola del sistema: Lara, Zulia, Mérida, Táchira, Barina y Alto Apure”, destacó.
Justo en Zulia, los usuarios reportan cortes eléctricos de hasta 4 horas diarias; en Táchira, de 5 a 10 horas diarias, y en Lara, de 4 a 6 horas.
El estado más afectado es Nueva Esparta, donde los apagones duran hasta 14 horas cada día. Aguilar explicó que la demanda de la región insular se alimenta en gran medida de la termoeléctrica Juan Bautista Arismendi, la cual estaría afectada por la escasez de combustible.
La isla cuenta con un solo cable sublacustre, que permite importar no más de 150 megavatios de energía —60 % de la demanda del estado— producida en Guri. “La capacidad de ese cables es de 300 megavatios, pero los trabajos de adecuación del cable no se terminaron de ejecutar”, refirió Aguilar.
Ni el gobierno de Nicolás Maduro ni Corpoelec han informado sobre las razones de los racionamientos y las consecuencias que deja en el sector eléctrico la explosión de la planta de gas de Muscar, la cual afectaría severamente la producción de petróleo y gas en los campos orientales hasta febrero de 2025, según el medio especializado Standard & Poor’s (S&P) Global.
Con información de EL Pitazo