Durante la noche del jueves, un grupo de 177 venezolanos regresó al país tras ser repatriados desde Guantánamo.
El ministro de Relaciones Interior, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, estuvo presente en el arribo y les dio una cálida bienvenida, prometiendo «un trato amoroso» a quienes retornan a su patria.
El ministro enfatizó que estos repatriados están recibiendo «una segunda o tercera oportunidad de la vida» y resaltó el compromiso del gobierno con la revolución como un factor clave en este proceso.
Según Cabello, hasta la fecha, más de 900 mil venezolanos han sido repatriados y se les ha dado «los brazos abiertos».
Sobre el manejo de aquellos que podrían tener antecedentes penales, Cabello indicó que deberán comparecer ante la justicia venezolana.
En esta línea, explicó que de un grupo de 190 venezolanos que regresaron el pasado 10 de febrero, solo 17 tenían antecedentes. Para el grupo que llegó el jueves, se espera que la cifra de personas con antecedentes sea similar, dado que se llevó a cabo un chequeo inicial.
«El que tenga cuentas pendientes con la justicia tiene que ser pasado por tribunales, pero el que no debe sentirse en su Patria», afirmó Cabello, subrayando la intención del gobierno de diferenciar entre quienes han cometido delitos y quienes regresan sin problemas legales.
En relación a la presencia de algunos repatriados en actividades delictivas, el ministro fue explícito al declarar que de los primeros repatriados, «ni uno solo» había estado vinculado con el Tren de Aragua, un grupo criminal conocido en la región.
Cabello se comprometió a seguir una investigación cuidadosa sobre el perfil de los repatriados, manifestando que «si hay uno [con antecedentes delictivos], lo diremos, y si no hay, lo diremos también, porque acá no hay chantaje, hay un trabajo muy profesional».
Con información de Versión Final
