Donald Trump se ha convertido oficialmente en el candidato presidencial republicano tras recibir los votos de suficientes delegados en la Convención Nacional Republicana.
Trump ha sido el presunto nominado durante meses. Pero fue la votación de los delegados de la Convención Nacional Republicana en Milwaukee la que lo hizo oficial el lunes por la tarde.
Trump alcanzó el umbral necesario con los votos de su estado natal, Florida.
En 2016 y 2020, Trump no era el favorito, se preveía su caída y enfrentaba críticas dentro de su propio partido. Este año, aceptará la nominación republicana con su partido respaldándolo y los demócratas en agitación sobre la viabilidad del presidente Joe Biden.
Se realizarán las tareas habituales de la convención a lo largo de los cuatro días. Los delegados —casi 2.400— deben aprobar una plataforma y designar formalmente el binomio presidencial: Trump y su compañero de fórmula aún por nombrar.
Escucharán tanto a los candidatos nacionales como a muchos otros que reúnen apoyo a Trump y atacan a los demócratas. El Partido Republicano espera un momento triunfal.
“El ambiente político no sólo es excelente para Donald Trump, sino que es realmente excelente para los republicanos que se postulan para el Senado, gobernador, escaños en la Cámara de Representantes y otros cargos menores”, dijo Henry Barbour, un influyente miembro del Comité Nacional Republicano (RNC, por sus siglas en inglés) quien en ocasiones ha criticado a Trump en el pasado.
Trump ha enterrado a sus oponentes y se ha apoderado del partido. Los votantes reciben correos para recaudar fondos con el sello “Comité Nacional Trump” arriba de la dirección en el Capitolio del Comité Nacional Republicano.
La rival primaria más cercana de Trump, Nikki Haley, no estará en el escenario de la convención. En cambio, los delegados escucharán, entre otros, al gobernador de Florida, Ron DeSantis, quien puso fin a su campaña presidencial después de los caucus de Iowa e inmediatamente respaldó a Trump.
Con información de Telemundo