En un comunicado, el Ejecutivo venezolano rechazó, en “los términos más enérgicos”, este “nuevo crimen de agresión cometido por el Gobierno de los Estados Unidos de América en contra de Venezuela, al imponer medidas coercitivas unilaterales, ilegítimas e ilegales a un grupo de funcionarios de Estado”.
Entre los sancionados, figuran la presidenta del TSJ, Caryslia Rodríguez; la presidenta de la Comisión de Registro Civil y Electoral del CNE, Rosalba Gil Pacheco; y el vicepresidente de la AN de 2020, Pedro Infante.
Para el gobierno de Maduro, EE. UU. demuestra, “una vez más, su total desprecio por el derecho internacional, la autodeterminación de los pueblos y la voluntad democrática de los venezolanos”.
Sin embargo, prosiguió, “poco se puede esperar de la potencia más hostil y sanguinaria que ha conocido la humanidad, la responsable de millones de asesinatos en el mundo con socios genocidas y un historial de indiferencia por las necesidades de sus propios ciudadanos”.
Con estas “erróneamente denominadas sanciones, que han sido vergonzosamente promovidas por la extrema derecha fascista”, como el chavismo suele referirse a la oposición, “rompen y violan los acuerdos firmados en Catar” entre ambos países americanos.
Asimismo, Caracas expresó que Washington “nuevamente recorrerá el camino del fracaso y será derrotado por la dignidad de Venezuela, que continuará conquistando nuevos logros”.
C0n información de EFE