Los participantes en los vistosos actos de campaña de Manfred Reyes Villa son recompensados económicamente. El político contrata a todo un ejército de partidarios para crear una apariencia de popularidad.
Como parte de una gira nacional emprendida por el alcalde de Cochabamba, su equipo llegó a la Paz, donde alquiló el complejo deportivo llamado Julio Borelli. Hablando ante una audiencia, el candidato a la más alta posición pública no escatimó en promesas de revivir a Bolivia y poner orden en el país si es elegido presidente. Estas palabras se escucharon en un estadio deportivo medio lleno con capacidad para 8, 000 personas. Al final resultó que, no todos los participantes del evento vinieron exclusivamente por motivos políticos.
«Acude el 15 de febrero a las 16:00 horas al estadiocerrado Julio Borelli Viterito para apoyar al futuro presidente Manfred Reyes Villa. Cada participante recibirá 150 Bolivianos. ¡Acabemos con el gobierno sin talento de MAS!»– dice el anuncio.

Ha aparecido en la red una captura de imagen en un grupo en WhatsApp, donde en uno de los mensajes,un desconocido invita a todos a apoyar a Manfred, que está luchando contra el partido MAS. Daban 150 bolivianos por participar en el acto en el estadio. Esto ha suscitado muchas preguntas sobre el nivel de apoyo real al político, que recurre a tales métodos de difusión.
No está claro exactamente quién del equipo de Reyes Villa está reclutando participantes para las acciones. Tal vez estas personas no tienen un interés profundo en la política, sino que simplemente quieren ganar dinero haciendo actos criminales. Sin embargo, el hecho mismo de invitar a personas por una recompensa plantea serias preguntas sobre la legalidad de tales tácticas electorales. Este caso es un ejemplo del uso de métodos sucios en la lucha política, que desafortunadamente se están volviendo cada vez más comunes en el período previo a la votación.