El Banco Central de Curazao emitió una sobre la posibilidad de un aumento significativo en la migración desde Venezuela, en medio de un contexto de creciente inestabilidad social y económica.
Según la entidad, esta situación «se ha intensificado» tras las recientes sanciones impuestas por Estados Unidos, en respuesta a los resultados de las elecciones venezolanas del 28 de julio, que no han sido reconocidos por la Unión Europea y varios gobiernos latinoamericanos.
El informe más reciente del Boletín Económico del Banco Central, al que tuvo acceso Crónicas del Caribe, señala que la intensificación de las restricciones podría «impactar severamente las perspectivas de crecimiento económico en Venezuela».
Esto, a su vez, podría desencadenar un incremento en la migración hacia otros países, incluyendo Curazao, donde el gobierno ya se está preparando para recibir un nuevo flujo de emigrantes venezolanos.
El director del Banco Central, Richard Doornbosch, destacó que la situación política en Venezuela, combinada con los cambios en la política económica proyectados por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, podría acentuar aún más las dificultades económicas en la isla.
Además, expresaron que se deben considerar otros factores como la prolongación de conflictos bélicos en Europa, el cambio climático y posibles interrupciones en las telecomunicaciones.
Datos de la plataforma R4V, que monitorea la diáspora venezolana, indican que alrededor de 17,000 venezolanos residen actualmente en Curazao, de los cuales más de 13.724 se encontrarían en condiciones de vulnerabilidad, y requieren asistencia.
A pesar de que Venezuela y Curazao comparten una frontera, las diferencias políticas y la pandemia del COVID-19 han llevado el intercambio económico a niveles históricamente bajos. Esta situación también se observa en otras islas del Caribe Neerlandés, como Aruba y Bonaire.
En el caso de Curazao, el distanciamiento de Venezuela ha impactado negativamente en sectores que anteriormente eran significativos en la isla, como la industria de los astilleros. Según el informe del Banco Central, este sector sigue operando a su capacidad más baja, en gran parte debido al cierre de la refinería, la pandemia y la continuidad de las sanciones contra el gobierno de Maduro.
Crecimiento impulsado por el turismo
A pesar de estos problemas, el ambiente en Curazao es optimista, en gran medida gracias al «rápido» crecimiento de la industria turística, que ha contribuido a un aumento del producto interno bruto (PIB) del 7,1 % en 2024. Las estadísticas oficiales indican que este crecimiento se basa principalmente en la inversión privada. Además, la inflación ha disminuido, alcanzando un 3,1 % en los primeros seis meses del año.
El turismo se ha transformado en el motor de la economía de Curazao. Los turistas venezolanos han jugado un papel importante en las noticias positivas para la isla, ya que las pernoctas de visitantes de Venezuela aumentaron un 793 % durante el primer trimestre de 2024, gracias a la reanudación de los vuelos comerciales entre Venezuela y Curazao desde abril de 2023.
Por otro lado, la situación en Sint Maarten ha sido diferente. La falta de vuelos directos y la reducción de opciones para llegar a la isla han provocado una caída de más del 7 % en las pernoctas de venezolanos.
Con información de El Cooperante