La policía francesa detuvo a 68 personas en París por diversos tipos de incidentes ocurridos antes y después de la conclusión de la final de la Champions League.
El partido, que enfrentó al Paris Saint-Germain (PSG) y al Inter de Milán en Múnich, culminó con la victoria del equipo galo, pero la celebración en la capital francesa se vio empañada por desórdenes.
Para las 22:00 hora local (20:00 GMT), incluso antes de que comenzara el segundo tiempo, ya se habían registrado 59 detenciones, principalmente por el lanzamiento de fuegos de artificio y otros productos incendiarios.
La Prefectura de Policía de París informó que los agentes tuvieron que recurrir al uso de un camión con cañón de agua para resguardar la Plaza de la Estrella, donde se ubica el Arco del Triunfo.
En este punto, las barreras de seguridad fueron superadas por una multitud que, según las autoridades, no estaba interesada en el partido, sino que «buscaba el contacto con las fuerzas del orden».
En los Campos Elíseos, se detectó la presencia de individuos «revoltosos que buscan causar incidentes», quienes lanzaron proyectiles y fuegos artificiales contra la policía.
Además, varias personas intentaron ingresar a pie al Periférico, la autopista de circunvalación de París.
Ante esta situación, las fuerzas del orden intervinieron «sistemáticamente» para mantener la circulación, lo que llevó a nueve detenciones adicionales.
Las autoridades francesas habían desplegado un dispositivo «masivo» que incluyó 5.400 agentes en París y su área metropolitana para prevenir y controlar los incidentes, especialmente considerando los desórdenes previos que se produjeron cuando el PSG se clasificó para la final.
Con información de El Nacional
