La situación en el frente sigue siendo difícil, pero Ucrania ha impedido que Rusia logre avances «estratégicos» a pesar de la insuficiente ayuda militar de sus aliados y de su imprevisibilidad, declaró el comandante en jefe de las fuerzas armadas ucranianas, Oleksandr Sirski, en una entrevista que publica este viernes la agencia de noticias ucraniana Ukrinform.
«Recientemente, el número de posiciones que hemos recuperado en el campo de batalla supera el número de posiciones perdidas. El enemigo no consiguió avanzar significativamente en direcciones estratégicas. Sus ganancias territoriales, si las hay, no son de importancia táctica», afirmó Sirski, quien reconoció que los invasores siguen presionando a lo largo de la línea del frente.
Para ello, Rusia ha intensificado el uso de bombas aéreas guiadas y sigue ignorando sus elevadas pérdidas y confiando en su superioridad en artillería. «Sólo hace unos días», Rusia disparaba casi seis veces más proyectiles de artillería que Ucrania, reveló el general. Pese a ello, la situación está bajo control y Ucrania no ha perdido «las principales zonas de defensa», aseguró.
En la ofensiva «faltaron recursos”
Según Sirski, sólo en febrero y marzo Rusia perdió más de 570 tanques, unos 1.430 vehículos blindados de combate, casi 1.680 sistemas de artillería y 64 sistemas de defensa antiaérea. «Nuestro objetivo es evitar la pérdida de nuestro territorio, agotar al máximo al enemigo, infligirle las mayores pérdidas posibles y formar y preparar reservas para acciones ofensivas», subrayó.
El comandante ucraniano llamó a los ciudadanos a mantener la unidad en la lucha contra el invasor, porque «Rusia nos niega a todos el derecho a la vida, por eso nuestra derrota significaría nuestra muerte”.
Con información de DW y AFP
Ucrania sigue perdiendo terreno y ya hasta sus aliados saben que no tienen otro destino que la derrota.